No es la intención de este blog hablar de política y mucho menos de
economía, pero claro, cuando una coge el periódico y ve este tipo de noticias (ver link al final de la entrada)
no puede hacer oídos sordos a todo lo que está pasando. Y está claro que la
educación siempre ha estado ligada a la política, y sino que se lo digan a la
LOCE, la LOGSE y la LOE, entre otras…
Claro, ahora nos plantamos ante esta situación, nos suben el IVA en
numerosos artículos, por supuesto tocándonos la cultura (para el Gobierno es
mejor que seamos lo más incultos posibles, más fáciles de manejar seremos) y la
última guinda ha sido la subida del IVA del 4% al 21% (¿estamos locos?). En
fin, veo un mensaje bastante claro en todo lo que está pasando: que se joda
toda la población y que se jodan también los niños. Total, ¿por qué vamos a
invertir en ellos? Si no son para nada el futuro de este país. ¿Por qué vamos a
invertir en educación? Si cuantas más trabas pongamos mejor para todos (espero
que se capte la ironía).
Entonces veo también al señor Montoro y compañía diciendo que no hay más
remedio, que no se puede hacer otra cosa, que son medidas dolorosas pero oye,
que las están tomando con cariño, ¿eh? Podemos ver también al señor Rajoy
señalando que no tienen más opciones, que tienen que elegir entre lo malo y lo
peor.
Oye, quizás debería volver a remitirme al trabajo que está haciendo
Hollande en Francia, porque me da la sensación de que sí hay más opciones. Más
de uno debería coger su programa y las medidas que está tomando para aprender
un poco, pero claro, aquí lo que interesa es que todos seamos borregos.
De todas formas no deja de ser interesante tener en cuenta alguna de las
medidas que ha tomado Hollande hasta ahora, entre ellas:
-
Supresión del 100% de los
coches oficiales y subasta de los mismos. Lo recaudado se destina al Fondo de
Bienestar para ser distribuido a las regiones con el mayor número de centros
urbanos con los suburbios ruinosos.
-
Abolición de los "vehículos de empresa" desafiando a los
altos cargos con frases como "si un ejecutivo que gana 650.000 euros año,
no puede permitirse el lujo de comprar un buen coche con sus ingresos del
trabajo, quiere decir que es demasiado ambicioso, que es estúpido, o que es
deshonesto. La nación no necesita ninguna de estas tres figuras". 345
MILLONES DE EUROS SALVADOS Y TRASLADADOS A CREAR 175 INSTITUTOS DE
INVESTIGACIÓN CIENTÍFICA CON LA CONTRATACIÓN DE 2560 JÓVENES CIENTÍFICOS
DESEMPLEADOS.
-
Privación a la Iglesia de subsidios estatales por valor de 2,3
millones de euros que financiaban exclusivos colegios privados, y ha puesto en
marcha (con ese dinero) un plan para la CONSTRUCCIÓN DE 4.500 JARDINES DE
INFANCIA Y 3.700 ESCUELAS PRIMARIAS.
-
REDUCCIÓN EN UN 25% DEL SUELDO DE TODOS LOS FUNCIONARIOS DEL
GOBIERNO, EL 32% DE TODOS LOS DIPUTADOS Y EL 40% DE TODOS LOS FUNCIONARIOS
ESTATALES DE ALTO NIVEL QUE GANAN MÁS DE 800.000 € POR AÑO.
Ah, que no se me olvide decir que todo esto no son sólo palabras, son
HECHOS. Pero aquí no se puede hacer otra cosa, ¿verdad? ¿No se quiere o no se
puede?
Menuda sorpresa que aquí los más perjudicados siempre seamos los mismos, y
menuda sorpresa que siempre se esté tocando y perjudicando a dos de los pilares
más fundamentales como son la sanidad y educación.
Llamadme ilusa, pero sigo pensando que la actuación que está llevando el
Gobierno es la peor que podían llevar, están tomando las decisiones peores.
¿Qué no hay dinero en las arcas? ¿Qué no se puede hacer otra cosa?
Señor “presidente”, tome usted nota de nuestro país vecino.
Irene Ramos