sábado, 21 de julio de 2012

Nos "IVA" a joder, pero por todas partes

No es la intención de este blog hablar de política y mucho menos de economía, pero claro, cuando una coge el periódico y ve este tipo de noticias (ver link al final de la entrada) no puede hacer oídos sordos a todo lo que está pasando. Y está claro que la educación siempre ha estado ligada a la política, y sino que se lo digan a la LOCE, la LOGSE y la LOE, entre otras…
Claro, ahora nos plantamos ante esta situación, nos suben el IVA en numerosos artículos, por supuesto tocándonos la cultura (para el Gobierno es mejor que seamos lo más incultos posibles, más fáciles de manejar seremos) y la última guinda ha sido la subida del IVA del 4% al 21% (¿estamos locos?). En fin, veo un mensaje bastante claro en todo lo que está pasando: que se joda toda la población y que se jodan también los niños. Total, ¿por qué vamos a invertir en ellos? Si no son para nada el futuro de este país. ¿Por qué vamos a invertir en educación? Si cuantas más trabas pongamos mejor para todos (espero que se capte la ironía).
Entonces veo también al señor Montoro y compañía diciendo que no hay más remedio, que no se puede hacer otra cosa, que son medidas dolorosas pero oye, que las están tomando con cariño, ¿eh? Podemos ver también al señor Rajoy señalando que no tienen más opciones, que tienen que elegir entre lo malo y lo peor.
Oye, quizás debería volver a remitirme al trabajo que está haciendo Hollande en Francia, porque me da la sensación de que sí hay más opciones. Más de uno debería coger su programa y las medidas que está tomando para aprender un poco, pero claro, aquí lo que interesa es que todos seamos borregos.
De todas formas no deja de ser interesante tener en cuenta alguna de las medidas que ha tomado Hollande hasta ahora, entre ellas:
-          Supresión del 100% de los coches oficiales y subasta de los mismos. Lo recaudado se destina al Fondo de Bienestar para ser distribuido a las regiones con el mayor número de centros urbanos con los suburbios ruinosos.
-          Abolición de los "vehículos de empresa" desafiando a los altos cargos con frases como "si un ejecutivo que gana 650.000 euros año, no puede permitirse el lujo de comprar un buen coche con sus ingresos del trabajo, quiere decir que es demasiado ambicioso, que es estúpido, o que es deshonesto. La nación no necesita ninguna de estas tres figuras". 345 MILLONES DE EUROS SALVADOS Y TRASLADADOS A CREAR 175 INSTITUTOS DE INVESTIGACIÓN CIENTÍFICA CON LA CONTRATACIÓN DE 2560 JÓVENES CIENTÍFICOS DESEMPLEADOS.
-          Privación a la Iglesia de subsidios estatales por valor de 2,3 millones de euros que financiaban exclusivos colegios privados, y ha puesto en marcha (con ese dinero) un plan para la CONSTRUCCIÓN DE 4.500 JARDINES DE INFANCIA Y 3.700 ESCUELAS PRIMARIAS.
-          REDUCCIÓN EN UN 25% DEL SUELDO DE TODOS LOS FUNCIONARIOS DEL GOBIERNO, EL 32% DE TODOS LOS DIPUTADOS Y EL 40% DE TODOS LOS FUNCIONARIOS ESTATALES DE ALTO NIVEL QUE GANAN MÁS DE 800.000 € POR AÑO.

Ah, que no se me olvide decir que todo esto no son sólo palabras, son HECHOS. Pero aquí no se puede hacer otra cosa, ¿verdad? ¿No se quiere o no se puede?
Menuda sorpresa que aquí los más perjudicados siempre seamos los mismos, y menuda sorpresa que siempre se esté tocando y perjudicando a dos de los pilares más fundamentales como son la sanidad y educación.
Llamadme ilusa, pero sigo pensando que la actuación que está llevando el Gobierno es la peor que podían llevar, están tomando las decisiones peores. ¿Qué no hay dinero en las arcas? ¿Qué no se puede hacer otra cosa?
Señor “presidente”, tome usted nota de nuestro país vecino.



Irene Ramos

viernes, 13 de julio de 2012

Una reflexión sobre las Competencias Básicas en las aulas

Alrededor de 6 años se lleva fomentando e intentando llevar hasta las aulas el trabajo por Competencias Básicas, que como dije en alguna entrada anterior, se trata de enseñar y formar a nuestros alumnos para que el día de mañana sean personas competentes y sepan desenvolverse en la sociedad.

Para ello es necesario interrelacionar todas las áreas o materias de aprendizaje, de forma que se establezcan lazos y conexiones entre ellas de cara a un aprendizaje significativo, en lugar de tratar cada área como si fuese un cajón separado de todas las demás.

Este es el primer punto que debemos tener en cuenta a la hora de realizar nuestras Programaciones y Unidades Didácticas, no obstante, aunque se trata de un tema que ya suena y se ha hecho eco, no quiere decir que no se hayan encontrado y se sigan encontrando dificultades.

Hablo de dificultades en este caso fundamentalmente basadas en la falta de formación y la falta de recursos, así como el establecimiento de una metodología que permita que el aprendizaje se dé de una forma continua y no se encuentren escalones tan grandes de un ciclo a otro o de una etapa a otra.

Con esto quiero decir, cómo no, lo importante que es trabajar por Competencias Básicas durante todas las etapas, desde Educación Infantil hasta la Universidad -si me apuráis, aunque sea una utopía- y pasando por las etapas intermedias como son Educación Primaria, ESO y Bachillerato. Tampoco debemos dejar de lado la Formación Profesional.

Sin embargo este es uno de los primeros escollos que podemos encontrarnos a la hora de llevar a cabo nuestra labor, puesto que cada docente es un mundo -está claro- y en muchas ocasiones el 'cambio' da miedo y hay personas que no se atreven a arriesgar para poder conseguir entre todos una educación de calidad.

Por otra parte, existen muchos otros problemas que nos vamos encontrando por el camino, además de los ya mencionados. En mi opinión se debería fomentar mucho más el trabajo en equipo, y tratar entre todos de ir dejando atrás ese 'secretismo' que en ocasiones encontramos por motivos varios como pueden ser no estar seguros de si lo que estamos programando es adecuado o como por ejemplo no querer compartir con otros compañeros el trabajo que cada uno ha realizado.

Un primer paso sería que por fin se diese un cambio de mentalidad en este sentido, puesto que todos somos compañeros y perseguimos un mismo fin, por este motivo pregunto: ¿por qué no poner en común nuestras ideas? Así podríamos enseñar a los demás y aprender de los demás, además de mejorar nuestro propio trabajo dentro de las aulas y fomentar el compañerismo y el trabajo en equipo dando ejemplo.

Puede que a algunos esto os suene bastante utópico, o incluso penséis que sería imposible que algo así pasara porque cada persona tendrá su opinión acerca del tema y habrá personas que prefieran continuar trabajando como lo han hecho hasta ahora. Al respecto os digo, sí, es cierto. Habrá gente que no quiera arriesgar, está claro, pero lo que también tengo claro es que si de verdad queremos cambiar algo y mejorar desde nuestra posición la educación, alguien tendrá que poner la primera piedra.

"Muchos granitos de arena hacen unas playas tremendas". 



Irene Ramos

martes, 3 de julio de 2012

Echando la vista atrás, objetivo: 1923

Hoy me ha dado por ponerme a buscar entre aquellas cosas interesantes que mantengo guardadas, y he ido a dar con el contrato que se les hacía a las maestras allá por el año 1923; una vez más he vuelto a sorprenderme.

Aquí os dejo el documento en el que se señalan los requisitos y las obligaciones que debían firmar las maestras para poder ejercer su profesión, cada cual más interesante... digamos.
Recuerdo la primera vez que nos enseñaron este contrato, cuando estábamos todavía comenzando la carrera -a más de uno/a le hubiese echado para atrás pensar que esto fuese así hoy en día.

Afortunadamente, se ha evolucionado, y aunque hoy en día la profesión de maestro/a no está lo suficientemente valorada, al menos hay muchas cosas que se han ido dejando atrás.

Si bien es cierto, que una parte de culpa es nuestra, de los propios profesionales, a la hora de hacernos valorar lo primero que debemos tener en cuenta es que somos nosotros mismos los primeros que tenemos que estar seguros de la labor que realizamos.

Queda mucho camino por delante, eso está claro, pero no debemos bajar los brazos. Mucho he aprendido a lo largo de estos años acerca de mi profesión. Somos pilares importantes de esta sociedad, es decir, no podemos considerarnos inferiores con respecto a otras profesiones por nada del mundo: estamos educando al futuro y hacia el futuro.

Las condiciones han mejorado, se puede comprobar aquí mismo, pero vuelvo a repetir que nos queda mucho por hacer.

Irene Ramos